lunes, 12 de septiembre de 2016

MEMORIAS DEL CUERPO (XXII)

Escribir es una maldición que salva. Es una maldición porque obliga y arrastra, como un vicio penoso del cual es imposible librarse. Y es una salvación porque salva el día que se vive y que nunca se entiende a menos que se escriba.
Escribir es usar la palabra como carnada, para pescar lo que no es palabra. Cuando esa no-palabra, la entrelínea, muerde la carnada, algo se escribió. Una vez que se pescó la entrelínea, con alivio se puede echar afuera la palabra.

Clarice Lispector




La poesía es un algo cuya sustancia trasciende toda noción humana. Es un acto inexplicable, digamos que intangible, y su naturaleza nunca deja de sorprendernos. 

El momento absoluto en que sucede, la poesía, se nutre de multiplicidad de significados al tiempo que los recorre, y proyecta en cada receptor nuevas aventuras cognoscitivas. Por eso un verso abunda en significados y un poema contiene tantas lecturas y tanta libertad. 


En mis textos procuro añadir a una imagen coyuntural, o frase prístina, esa confluencia sensitiva: invitar al lector a que participe de la experiencia, no de leer o vivir, sino también de CREAR este instante relativo. 


Os atrevéis a intentarlo???? 






Dame una gardenia...


Dame una gardenia
que son ellas las flores de los muertos

Qué blanda fue su risa
la manera de llegarse hasta mi vientre
perfumando las raíces de mi estómago
cual una espada que se intuye en la tarde

Toda ciudad es el fondo una flor marchita
una esperanza de acudir
a la sed que los portales envuelve
con finísimos poros

Dame una gardenia
que son ellas las horas de los cuerpos
y yo estoy harta de ver hombres hermosos
jugando con los niños en la playa




MARGINALIA: La naturaleza poética de la gardenia es recurrente en la afectividad relacionada con la tristeza, como el caso de este bolero de Isolina Carrillo. / Dame una gardenia... es un texto que pertenece al cuaderno  Memorias del Cuerpo, publicado como avance en el libro que nombra a este blog. / Otros poemas de dicho libro pueden leerse aquí. 

Bolero Dos Gardenias - Lucrecia